âEstamos cada vez peor, obviamente la angustia, la tristeza y el dolor es cada vez peor, pero además nos sentimos muy muy frustrados, muy enojados.
Por: Agencias
Argentina.- Los familiares de los 44 tripulantes del submarino Ara San Juan exigieron el martes al Gobierno de Argentina saber qué paso con el buque cuando se cumplen 6 meses de su desaparición en el Atlántico.
En dos marchas simultáneas realizadas en Buenos Aires y Mar del Plata, lugar cuyo puerto era el destino final de un viaje que nunca se terminó, pidieron al Gobierno de Mauricio Macri que agote recursos hasta encontrar el sumergible desaparecido el pasado 15 de noviembre.
Las 44 familias se agolparon pacíficamente frente a las vallas de la Casa Rosada -sede del Gobierno argentino- situada en la emblemática Plaza de Mayo, y denunciaron que su situación es âcada vez peorâ.
Nos han negado el conocimiento de dónde están y fundamentalmente de qué pasóâ, explicó en declaraciones a Efe Luis Tagliapietra, padre del teniente de corbeta Alejandro Damián Tagliapietra.
El abogado definió como una âluchaâ la cruzada que viven los familiares y el Gobierno argentino, que prometió hacer âlo que estuviera en su manoâ para localizar el buque, del que se tuvo un último contacto días después de que desapareciera tras abandonar el austral puerto de Ushuaia.
âCada día vamos descubriendo que nos han encubierto, nos han mentido, nos han engaí±ado y eso no puede pasar, es una vergí¼enzaâ, alegó, y aí±adió que el motivo de la marcha es que el Ejecutivo agote âtodos los recursos para encontrarlosâ.
Como cada aniversario, los familiares portan en su protesta imágenes del submarino, banderas argentinas y fotografías de sus seres queridos desaparecidos aquel 15 de noviembre.
Isabel Polo, hermana del cabo primero Daniel Alejandro Polo, lamentó tener que quedarse tras las vallas de la sede del Gobierno en una fecha âtan importanteâ.
âNos concentramos frente al Congreso de la Nación, este es el primer mes que marchamos porque nunca antes lo hicimos, nos acompaí±aron los veteranos de guerra de las Malvinasâ, explicó Polo.
A unas cuadras de llegar al vallado que rodea actualmente la Casa de Gobierno, la Policía les indicó que no podrían hacer donde siempre su ritual habitual de decir los nombres de los 44 tripulantes y cantar el himno nacional.
âNuestro reclamo es al presidente, al ministro de Defensa y a la Armada, no tiene nada que ver con el Congreso, por eso nos fuimos de alláâ, aseveró Polo, quien defendió que el Ejecutivo pretende, con esto, âcensurarlosâ.
Mientras que Macri mantiene su promesa de hacer lo posible por hallar a los 44, y al tiempo que deciden cuál de las 9 empresas que se postularon para recoger el testigo de la búsqueda internacional sin precedentes realizado los primeros días de la desaparición, las familias depositan su esperanza en las compaí±ías privadas.
Por su parte, en la comisión bicameral que se estableció el pasado marzo en el Congreso argentino, el exjefe de la Armada Marcelo Srur aseguró hoy que no fue informado de los fallos, alguno de ellos âgraveâ, que había sufrido el submarino antes de desaparecer, y que de haber conocido su estado este no hubiera zarpado.
Tras un encuentro a puerta cerrada con diputados y senadores, Srur respondió a algunos familiares en una tensa declaración en la que le llegaron a preguntar si âpuede dormir tranquiloâ.
Además de esos problemas previos con los que el sumergible inició su última misión hacia Ushuaia, el comandante del buque alertó de un âprincipio de incendioâ por la entrada de agua en el compartimento de baterías días después de partir desde aquel puerto, un problema que, según la Armada, había sido solucionado.