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Convierte estanquillo en su salón de clases

La maestra tiene cinco años de servicio en el sistema y el ciclo pasado llegó a la colonia como maestra de apoyo en un jardín de nueva creación.

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La maestra tiene cinco aí±os de servicio en el sistema y el ciclo pasado llegó a la colonia como maestra de apoyo en un jardí­n de nueva creación.

Por Yadira Leos

Saltillo, Coahuila.- Una maestra remodeló un estanquillo viejo para hacerlo su lugar de trabajo. Perla Argí¼ello es maestra de educación especial, recientemente le asignaron dos escuelas de nueva creación en la colonia Nueva Teresitas, pero no cuenta con un salón para realizar sus labores y decidió conseguirlo.

La maestra tiene cinco aí±os de servicio en el sistema y el ciclo pasado llegó a la colonia como maestra de apoyo en un jardí­n de nueva creación. La población era poca y no se contaba con director, por lo que ella se acomodaba para atender a sus alumnos en la dirección. Este ciclo escolar le asignaron también una primaria de nueva creación. La demanda de estos planteles aumentó considerablemente, por lo que se hizo necesario que la maestra de educación especial, la psicóloga y la trabajadora social cuenten con un espacio propio. En ambas escuelas hay construcciones de aulas regulares por la demanda de alumnos y entre los planes se encuentra el salón de apoyo, sin embargo, reconoció que existen otras prioridades para las autoridades.

estansalon

Por iniciativa propia Perla buscó un estanquillo; cuando se lo regalaron, con ayuda de sus familiares y amigos logró trasladarlo a la escuela y comenzaron a adecuarlo; lo colocaron sobre las tarimas, les llevaron unos tablones de madera que hacen la función de piso. “No es un trabajo sólo mí­o, también es de mis compaí±eros; el espacio está bien porque no atendemos a todos juntos, trabajamos con alumnos individuales o grupos pequeí±os, por eso el espacio es el adecuado por mientras”, dijo. Con dos cubetas de pintura, blanca y verde, que les regalaron le dieron color; con clavos, alambres y mecates remacharon la estructura; con mucha mano de obra ya va tomando forma, ahora les falta la puerta y el barniz. Este serí­a el primer salón, que atenderá a 20 alumnos y a los padres de la primaria, pero la meta, dijo la maestra, es conseguir otro estanquillo para atender a los 12 estudiantes del jardí­n.
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