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Se arrebatan ‘inocencia’ niños coahuilenses

La Pronnif registró 62 casos de abuso sexual entre menores en 2017; acceso a pornografía y abuso físico se consideran detonantes.

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La Pronnif registró 62 casos de abuso sexual entre menores en 2017; acceso a pornografí­a y abuso fí­sico se consideran detonantes.

Por Yadira Leos

Saltillo, Coahuila.- Un total de 62 casos de abuso y violación entre nií±os de 8 a 12 aí±os fueron registrados en el último aí±o por la Procuradurí­a para Nií±os, Nií±as y la Familia (Pronnif) en la Región Sureste de Coahuila. La subprocuradora en la Región Sureste, Gabriela Ramos Castaí±eda, explicó que de estos casos al menos 10 son confirmados como violación y el resto como abuso, un indicador que causa preocupación.

Ramos Castaí±eda explicó que en lo que va del aí±o, en la Región Sureste se tomó conocimiento de cuatrocasos más entre menores de 12 aí±os, de los cuales dos fueron en casa por familiares menores de edad y el resto en las escuelas por compaí±eros, lo que también advierte que el acoso escolar puede ser uno de los indicadores a considerar en el abuso sexual entre nií±os.

En la Región Centro, en donde fue reportada hace unos dí­as una violación en una escuela, dijo la subprocuradora también tienen registrados cuatro casos en lo que va del aí±o.

“Ya se está trabajando en la agresión hacia un nií±o de 8 aí±os, existen ciertas contradicciones sobre quién participó, pero existe un dictamen del médico legista en donde se establece que hubo penetración, sin especificar el objeto con el cual fue ví­ctima el nií±o”, aseguró la funcionaria estatal.

Dijo que una vez que la madre denunció la vulneración de los derechos de su hijo, el protocolo seí±ala que si el abuso ocurrió en la escuela se realiza una entrevista al nií±o y se enví­a un oficio a la Secretarí­a de Educación, para que informe si tiene conocimiento y determine la activación de los protocolos.

La funcionaria aseveró que en todos los casos se identificó a los agresores a quienes les brindaron ayuda sicológica y se canalizó al Grupo de Atención a Ví­ctimas. Además, la Pronnif da seguimiento con visitas domiciliarias, ya que no puede tipificarse como delito porque es perpetrado por un menor de 12 aí±os.

‘A UN CLICK DEL PORNO’

Una fotografí­a de una menor de edad viendo una pelí­cula pornográfica en plena área del comedor de un centro comercial al sur de la ciudad, se viralizó en las redes sociales para reflejar la gravedad de un problema que en las estadí­sticas ha provocado preocupación: México es uno de los más grandes difusores y consumidores de pornografí­a y esto permea en los más pequeí±os.

En la fotografí­a que se tomó en Saltillo se observa una nií±a sentada con un celular en la mano y al enfocar la imagen se puede ver que mira un video donde una pareja tiene sexo oral. Cerca de ella se aprecia a otra persona en el celular sin percatarse de lo que la pequeí±a está viendo.

La persona que publicó en las redes, aseguró que le comentó a la mamá lo que su hija estaba viendo; sin embargo, la seí±ora desacreditó el hecho. Por lo que la persona exhorta a los padres a vigilar qué hacen o qué ven los nií±os en internet.

En este tema, la subprocuradora de la Región Sureste, indicó que ya tienen la fotografí­a e iniciaron una investigación pues la menor pudiera estar en situación de riesgo en el entorno familiar o escolar.

“Ya tenemos la fotografí­a, no tenemos datos, la Policí­a Investigadora está trabajando, esperamos dar con el paradero de la nií±a para verificar su entorno, ya que es posible que esté en situación de riesgo, pedimos la colaboración de la sociedad que nos ayude a identificarla”, concluyó.

Este es uno de los problemas más graves, ya que la hipersexualización y el acceso tan fácil a contenido de impacto sexual, sumado a una orientación sexual precaria puede ser el detonante para que un pequeí±o busque imitar y de ahí­ se despierte una curiosidad que puede provocar un abuso sexual.

ORIENTACIí“N: FACTOR CLAVE

A raí­z de la circulación de la fotografí­a donde una menor es captada mientras utiliza un dispositivo móvil en el que presuntamente está observando contenido pornográfico, Zócalo se dio a la tarea de identificar la instantaneidad con la que se puede tener acceso a este contenido.

En las calles de Saltillo, es posible encontrar puestos de revistas que, principalmente, se encuentran ubicados en el Centro de la ciudad. En éstos, se exhiben con normalidad revistas y libros con contenido sexual y erótico, puestos a la venta.

El Artí­culo 42 del Reglamento de Mercados Municipales y Uso de la Ví­a y Espacios Públicos para el Comercio, menciona que está prohibido vender material pornográfico y/o exponer ese tipo de material al público.

Legalmente, todo producto que contenga temática para adultos y contenido sexual, deben ser clasificados respecto a eso, tanto en programas televisivos, pelí­culas expuestas en cine, y la venta de libros, revistas y demás impresos.

Finalmente, internet al ser un medio de consumo sin un lugar exclusivo para su uso, no puede regular el acceso que llegan a tener los nií±os y adolescentes en cuanto al consumo de contenido pornográfico o de í­ndole sexual, por lo que queda solamente en manos de los padres de familia regular e impedir el acceso a éste.

FENí“MENO CíCLICO

La revolución digital también es vista como uno de los detonadores de la hipersexualización y del acceso a toda clase de contenido para los menores de edad, que sin una orientación correcta, se exponen a este tipo de problemáticas. México al ser uno de los principales difusores y consumidores de pornografí­a a nivel mundial y también uno de los primeros lugares en abuso sexual infantil ve un crecimiento en este problema, a la par de que aún no existe un marco regulatorio a nivel jurí­dico o de rehabilitación para tratar con estos casos.

En su libro Violencia Contra Menores; un Acercamiento al Problema en México, la especialista Montserrat Pérez Contreras seí±ala que cuando “los nií±os crecen en un medio en donde la agresión es común, (...) e inclusive la violencia que se vive en el medio o lugar donde habitan, provocarán que el menor se desarrolle y crezca con una imagen distorsionada de lo que es la convivencia y el respeto, lo que los llevará a vivir y reproducir relaciones de maltrato y violencia”.

Por otro lado, Gioconda Batres Méndez, directora del Programa Regional de Capacitación contra la Violencia de Género y Trauma del Instituto Latinoamericano de Naciones Unidas para la Prevención del Delito advierte en su manual Nií±os/as que Abusan Sexualmente que no todos los nií±os ví­ctimas de abuso sexual entre menores repiten el esquema, aunque es importante que si ha dado sí­ntomas de ser ví­ctima de abuso se trate con una terapia integral, ya que cuando llegan a la adolescencia y adultez, “tendrán menos posibilidades de rehabilitación”.

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