
Antoine Boylston, de 31 aí±os, estuvo a punto de morir debido a su costumbre de "tronarse" los dedos; se abrió una herida en el dedo y le causó una infección.
Por: AgenciasEstados Unidos.- Antoine Boylston, de 31 aí±os, acudió al hospital tras sentir un fuerte dolor en el dedo meí±ique de la mano derecha.
"Cuando llegué, mi mano derecha había empezado a oscurecerse y a hincharse", dijo.
Tras hacerle una biopsia a su piel, los médicos determinaron que unas bacterias mortales que le devoraban por dentro, llamadas fascitis necrosante.
De acuerdo con los médicos, Boylston desencadenó la infección debido a su costumbre de "tronarse" los dedos, ya que tenía una costra en la mano. Cuando el hombre acudió al hospital, la infección ya le llegaba casi al codo.
"Todo ese tiempo pensé que solo tenía un dedo roto que me estaba haciendo sentir mal del estómago. No fue hasta que desperté de la cirugía y me dijeron que tenía fascitis necrosante cuando me di cuenta de la gravedad de la situación", seí±aló.
Boylston agregó que "los médicos me advirtieron que podía perder la mano, pero si hubiera esperado mucho más podría haber perdido todo el brazo o incluso haber muerto".