Allegados a las víctimas indicaron que estaban por salir del domicilio, pero aún no decidían a dónde ir.
Por: Agencias.
Monterrey.- Pese a que los esposos Eliud González Salazar, de 76 aí±os, e Irma Barbosa López, de 69, denunciaron en octubre ante la Procuraduría que corrían "grave riesgo" y "peligro inminente de derrumbe" por la construcción de la Torre Vía, las autoridades no actuaron a tiempo y primero se cayó su casa.
Fue hasta después de la muerte de la pareja, ocurrida el miércoles al mediodía, que las autoridades estatales "aceleraron" su caso, adelantando un día la comparecencia de uno de los implicados en la edificación.
Originalmente, la cita para el representante legal de la Constructora Legosa, responsable del proyecto, estaba programada para el viernes 24 de noviembre, es decir, 50 días después de que la pareja interpuso su denuncia, que fue seguida por al menos otras siete de vecinos del Fraccionamiento Antigua.
Rubén Fernández, abogado de la familia, seí±aló que la única actuación del Ministerio Público entre el 6 de octubre, cuando presentaron la denuncia, y el día del derrumbe, fue citar al representante legal de Legosa.
"Además de eso no había ninguna otra actuación, ni inspección, ni nada", dijo.
"No se había iniciado ninguna labor de investigación".
El miércoles al mediodía, uno de los muros de la construcción de la Torre Vía se colapsó y provocó la caída de cuatro casas, de las que tres estaban deshabitadas.
Sin establecerse aún por qué, la pareja se encontraba dentro de su hogar con una empleada doméstica que sobrevivió al derrumbe.
Después de la tragedia, las citas a representantes, responsables y trabajadores del desarrollo inmobiliario se aceleraron, aunque la Procuraduría no ha precisado cuántas comparecencias llevaba hasta anoche.
René González, representante legal de Legosa, compareció el jueves, aunque, según reveló la Procuraduría, se acogió a los beneficios del Artículo 20 constitucional para no declarar, y lo hará posteriormente por escrito.
El viernes, el Procurador Bernardo González refirió la existencia de las ocho denuncias previas al colapso del muro, y sostuvo que no aseguraron la zona porque existía una suspensión de obra aplicada por el municipio de Monterrey.
Argumentó que el conocimiento que tenía del caso es que había cuarteaduras en algunas casas.
En su denuncia de octubre, el matrimonio que falleció el miércoles acusa "severos daí±os" que constituían un grave riesgo a su integridad.
"La obra", seí±alan, "constituye un grave riesgo para los suscritos ya que su desarrollo ha representado severos daí±os a la casa habitación de nuestra propiedad, y a otras diversas que conforman el Fraccionamiento Antigua.
"Las obras en cuestión determinan un peligro inminente de derrumbe para las personas que diariamente habitamos el fraccionamiento".
Ayer, tras la realización de un peritaje, el municipio de Monterrey determinó que 94 de las 118 casas del fraccionamiento pueden ser habitadas nuevamente, luego del aseguramiento que la Procuraduría dictó horas después del derrumbe, por lo que hubo vecinos que regresaron a sus casos.
Investigan por qué la pareja seguía ahí
A cuatro días del derrumbe de cuatro casas en el Fraccionamiento Antigua, aún se investiga por qué aún habitaba su casa la pareja que falleció dentro de su residencia.
Extraoficialmente se informó que Eliud González, de 76 aí±os, y su esposa, Irma Barbosa, de 69, tenía el ofrecimiento de los desarrolladores de buscar una casa en renta o trasladarse a un hotel, como ya habían hecho otras familias.
Allegados a las víctimas indicaron que estaban por salir del domicilio, pero aún no decidían a dónde ir.
Una fuente de la Procuraduría seí±aló que recaban testimoniales de las últimas personas que tuvieron contacto con ellos para saber por qué seguían ahí, pese a que fueron alertados por el Municipio sobre el riesgo.