El sospechoso es un hombre de 22 aí±os y apellido Xu.
Por: AgenciasÂ
Beijing.-Â La Policía china identificó a un joven de 22 aí±os como el supuesto autor del atentado ocurrido ayer en una guardería del este del país, que causó ocho muertos, entre ellos el atacante, informó hoy la cadena oficial CCTV.
El sospechoso es un hombre de 22 aí±os y apellido Xu, vecino del distrito de Quanshan, en Xuzhou, ciudad perteneciente a la provincia de Jiangsu, que elaboró una bomba casera. Dentro de la vivienda que Xu alquilaba, los agentes encontraron materiales para fabricar explosivos, y las palabras "muerte" y "matar", escritas en la pared, La Policía afirmó que el sospechoso había sido expulsado de la escuela tras serle diagnosticadas alteraciones de la función nerviosa vegetativa. Después de eso, encontró un trabajo y comenzó a vivir en el departamento alquilado. Al parecer, la explosión, que se registró a las 16:48 horas de ayer, afectó especialmente a los adultos que esperaban para recoger a sus hijos a las puertas de la guardería, algunos de ellos acompaí±ados de menores. La tragedia provocó la muerte de ocho personas, incluido Xu, e hirió a otras 65; fuentes de los hospitales indicaron hoy que la vida de cuatro de los ocho heridos graves ya no corre peligro. Autoridades chinas precisaron que ningún profesor o estudiante del centro falleció en el atentado, si bien de momento no se ha publicado la identidad o edad de las víctimas. Un testigo citado por el diario oficial Global Times indicó que la detonación provocó que varias personas "salieran volando" varios metros. El Viceministro de Seguridad Pública, Huang Ming, viajó al lugar para supervisar las investigaciones, mientras el Ministro Guo Shengkun ordenó aumentar las medidas de prevención en zonas con alta densidad de población. En el pasado, varias escuelas infantiles fueron atacadas por sospechosos que, según las autoridades, tenían enfermedades mentales o guardaban rencor hacia sus vecinos y la sociedad. En tales agresiones, la mayoría emplea cuchillos, hachas o explosivos caseros, ya que China mantiene un férreo control sobre las armas de fuego.
